¡Bolerista soy!
Por Pincha Villa
Por Pincha Villa
Francamente, este verano ha sido musicalmente tranquilo. En general hemos escuchado músicas suaves, acompañando el clima general de indolencia y relax que llevaba consigo la gente de vacaciones. Sin duda, el río y el prado ayudan a ello. El trasiego de gentes nos refresca y nos aporta nuevas músicas que nos alimentarán el otoño e invierno, mientras nos dan pistas para conocer y ampliar esos intérpretes hasta ahora desconocidos. ¡Gracias Chic@s! (Seguimos sin poder escuchar la radio en este valle)
Empezamos la temporada con el “Back to Back” de la Winehouse, un disco magnífico y nos emocionaron los chirridos y lamentos de Anthony & Johnsons y las Cocorosie.
Pero si ha habido estilos predominantes en la época estival han sido la rumba y el bolero sobre todo.
El bolero siempre está ahí y no es un tópico. ¿Será que envejecemos? ¡Pero si somos C.A.S.P. (Cuarentones Aunque Sobradamente Preparados)! Sus letras llenas de sentimientos viscerales, excesivas, de amores arrebatados rodeados de “terribilitá”, nos retrotraen a sensaciones epidérmicas entre encuentros y desencuentros de pareja. Sus situaciones, a fuerza de extremas, buscan la complicidad y la identificación.
En esta “batalla” que se ha librado este verano en los altavoces del Molino ha ganado a los puntos el Tío Moncho, sin olvidar a la siempre rotunda Lupe o a la arrebatadora Mina. El Cigala –lo siento por los apasionados de Diego- todavía tiene que comer muchas sopas para superar al Rey del Bolero. El tío Moncho ha sacado un disco tremendo, de producción espléndida, donde interpreta estándares del género (“No”, “Bravo”, “Encadenados”,…) además de alguna de las canciones que han marcado su carrera (“Llévatela”, “Cariño”…), con sus correspondientes duetos (Lolita, Diego el Cigala, Niña Pastori…) Indispensable para amantes del género que podrán comparar: Tremenda “Me muero” y excelente la versión de “Encadenados”, comparable con la del lacrimógeno pero genial Lucho Gatica y goleada de Moncho frente al Cigala de “Bravo” en “Lágrimas 2”.
El éxito del bolero radica sin duda en el terrible despecho que subyace o aflora en los reproches y en la irresistible pasión de la entrega. Sin duda recuerda al tango cuando éste es definido como “Lamento de Cabrones”
Ahí va un compendio de frases con verdades como puños genialmente cantadas por Moncho:
Si a veces hablo de ti
no creas que es porque te quiero
es sólo porque recuerdo
lo que contigo yo sufrí.
Yo lloro
cuando no hay nadie
que te lo pueda decir
y es que…
Aunque…
Me muero
Por desabrochar tus ropas modernas
Por apaciguar tus ansias internas
por beber el dulce amargo
de tus besos impacientes
Por cabalgar vientre con vientre
me muero
pero es que…
Te pones maquillaje de mentir
y el paso del dolor ha de encontrarnos
de rodillas en la vida
frente a frente nada más
y es que
Te odio tanto
que yo mismo me espanto
de mi forma de odiar
Deseo que después que te mueras
no haya para ti un lugar
El infierno resulta un cielo
comparado con tu alma
y que Dios me perdone
por desear que ni muerta
tengas calma
Más conformista resulta La Lupe
Cuando se defiende con objetividad:
Pues dice la misma gente
que el día que te dejé
fui yo quien salió ganando
o Antonio Machín, otro pragmático:
El mar y el cielo se ven igual de azules
y en la distancia parece que se unen.
Mejor es que recuerdes
Que el cielo siempre es cielo
y que nunca, nunca el mar lo alcanzará
Permíteme igualarme con el cielo
que a ti te corresponde ser el mar
En fin, pasión concentrada que no nos deja indiferentes a fuerza de sentimientos arrebatados, buenos o malos... Todo depende del lado de la canción que te toque.
¿Alguien se anima a recomendarnos un bolero? Se aceptan sugerencias.
Empezamos la temporada con el “Back to Back” de la Winehouse, un disco magnífico y nos emocionaron los chirridos y lamentos de Anthony & Johnsons y las Cocorosie.
Pero si ha habido estilos predominantes en la época estival han sido la rumba y el bolero sobre todo.
El bolero siempre está ahí y no es un tópico. ¿Será que envejecemos? ¡Pero si somos C.A.S.P. (Cuarentones Aunque Sobradamente Preparados)! Sus letras llenas de sentimientos viscerales, excesivas, de amores arrebatados rodeados de “terribilitá”, nos retrotraen a sensaciones epidérmicas entre encuentros y desencuentros de pareja. Sus situaciones, a fuerza de extremas, buscan la complicidad y la identificación.
En esta “batalla” que se ha librado este verano en los altavoces del Molino ha ganado a los puntos el Tío Moncho, sin olvidar a la siempre rotunda Lupe o a la arrebatadora Mina. El Cigala –lo siento por los apasionados de Diego- todavía tiene que comer muchas sopas para superar al Rey del Bolero. El tío Moncho ha sacado un disco tremendo, de producción espléndida, donde interpreta estándares del género (“No”, “Bravo”, “Encadenados”,…) además de alguna de las canciones que han marcado su carrera (“Llévatela”, “Cariño”…), con sus correspondientes duetos (Lolita, Diego el Cigala, Niña Pastori…) Indispensable para amantes del género que podrán comparar: Tremenda “Me muero” y excelente la versión de “Encadenados”, comparable con la del lacrimógeno pero genial Lucho Gatica y goleada de Moncho frente al Cigala de “Bravo” en “Lágrimas 2”.
El éxito del bolero radica sin duda en el terrible despecho que subyace o aflora en los reproches y en la irresistible pasión de la entrega. Sin duda recuerda al tango cuando éste es definido como “Lamento de Cabrones”
Ahí va un compendio de frases con verdades como puños genialmente cantadas por Moncho:
Si a veces hablo de ti
no creas que es porque te quiero
es sólo porque recuerdo
lo que contigo yo sufrí.
Yo lloro
cuando no hay nadie
que te lo pueda decir
y es que…
Aunque…
Me muero
Por desabrochar tus ropas modernas
Por apaciguar tus ansias internas
por beber el dulce amargo
de tus besos impacientes
Por cabalgar vientre con vientre
me muero
pero es que…
Te pones maquillaje de mentir
y el paso del dolor ha de encontrarnos
de rodillas en la vida
frente a frente nada más
y es que
Te odio tanto
que yo mismo me espanto
de mi forma de odiar
Deseo que después que te mueras
no haya para ti un lugar
El infierno resulta un cielo
comparado con tu alma
y que Dios me perdone
por desear que ni muerta
tengas calma
Más conformista resulta La Lupe
Cuando se defiende con objetividad:
Pues dice la misma gente
que el día que te dejé
fui yo quien salió ganando
o Antonio Machín, otro pragmático:
El mar y el cielo se ven igual de azules
y en la distancia parece que se unen.
Mejor es que recuerdes
Que el cielo siempre es cielo
y que nunca, nunca el mar lo alcanzará
Permíteme igualarme con el cielo
que a ti te corresponde ser el mar
En fin, pasión concentrada que no nos deja indiferentes a fuerza de sentimientos arrebatados, buenos o malos... Todo depende del lado de la canción que te toque.
¿Alguien se anima a recomendarnos un bolero? Se aceptan sugerencias.
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